lunes, 8 de abril de 2013


Durante tres años Dekadenciasonora fue un fanzine que intentó conjugar la música, la literatura, el arte, la política,... 
Los responsables hoy duermen en un calabozo.

Yo, juvenilmente, me declaro culpable de algún que otro poema como este que hoy recupero.





en la pared me quedé leyendo
es tan cotidiano el hambre y su sufrimiento
es tan corriente que rompe al aire desde dentro
es tan normal darle vueltas al que no ve
es vanal. es verdad soltar palabras que aprietan

es o debería ser más fácil doblegar la teoría
para no navegar sin un rumbo fijo,
sin una palabra constante de aliento que queme
las intenciones del mal que está creciendo.

es un camino solitario.

es lo que algunos llaman ser presidiario.



Juan escribía en la pared su diario,
quiso morir de pena una noche
en que las grietas de la pared
fueron estrellas tan brillantes
como la luz de sus ojos.

Con la ceniza de su vientre pintaba, mercenario,
un alud de sensaciones, el ruido de un coche,
la mentira de ser peligroso tintineo
el de un dios que obligó a no ser
a muchos que corrían por la calle.

Y fue en esa única ocasión cuando quiso comprender.
Fue peor que todo
el no saber, si concernía el convencer
a la victoria o al derroche.
                                                   
                                                            Lunes, 12 de abril de 2010  


www.dekadenciasonora.blogspot.com


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